¿Qué opinan los lectores de mis aventuras?

Esta es la conversación que un papá y su hijo tienen sobre mí. ¿Qué os parece? A mí me encanta.

Diálogos mantenidos a lo largo de varios días y en momentos dispersos desde la llegada del cuento a casa:
Diálogo 1:
-Cuéntame, Greg. ¿Qué me dices de “Bernarda la Dragona”?
-Me gusta. Es una dragona que hace muchas cosas –contesta Greg.
-Es decir –le dice papá–: es una dragona trabajadora.
-Bueno, sí. Eso –contesta.
Diálogo 2:
-Papá, ¿nos leemos otra vez el cuento de “Bernarda la Dragona”?
-¿Por qué, hijo, si ya lo leímos ayer? –le pregunta papá.
-Porque es chulo y es chulo porque es chulo de chulo, papá.
-¡Ah, vale! Venga, pues entonces lo volvemos a leer.
-¡Síiiiiiiii…pero, papi, por favor, tienes que poner las voces tontas cuando lo leas!
Diálogo 3:
-Vega, vamos a decirle a papá que queremos leer el cuento de “Bernarda la Dragona” –papá escucha a ambos en la habitación, acaban de despertarse. Domingo por la mañana.
-¡Vale, vale, vale! –contesta Vega, a la que le gusta repetir las pocas palabras que pronuncia varias veces seguidas.
Ambos llaman a papá (que estaba preparando el desayuno):
-¡Papáaaaaaaaaaaaa…!
Papá acude a la llamada (a gritos):
-¿Qué pasa?
-No pasa nada. Papá, ¿leemos el cuento de Bernarda la Dragona? –dice Greg.
-¿Otra vez? –pregunta papá (poniendo cara disimulada de: ¡Pufffffff!)
Vega se ríe y Greg indica:
-Lo prometiste anoche. (Es una mentira como un camión de grande).
-Ah, vale. Pues entonces si lo prometí, debo cumplir mi promesa. Pero, Greg, antes debes decirme por qué quieres que leamos de nuevo el cuento.
Greg piensa unos segundos y responde:
-Tú dices que leer es bueno. Siempre lo dices, papá. Y yo quiero a Bernarda porque es buena.
Diálogo 4:
-Papá, el cuento de “Bernarda la Dragona” me gusta mucho.
-¿Por qué te gusta, Greg?
-Porque hay una niña guapa que va a ser mi novia cuando yo sea mayor y voy a conocerla montado en la dragona que se llama Bernarda.